jueves, 7 de febrero de 2008

El amor

Ya no se sentia amor en el aire como en los tiempo de la guerra fria, todos pensaban en comprar y comprar mas cosas, pero habia alguien que no, un tipo no muy afortunado ni en la vida, ni en el trabajo, ni en el amor, bueno en nada, una persona fea y poco lucida a la que llamaremos Perillas por llamarle de algun modo.
Todos los dias se levantaba al mediodia porque por las noches hiba a un conocido lugar gay a que le percutaran el ano para mantenerse en forma, ya eran muchos años de percutaciones y queria un cambio, queria percutar, intento percutar a los mendigos de su barrio pero no le satisfacian porque no le decian palabras de amor, hacia poemas gongorianos a las viejas que cagaban en los parques, pero nada.
Llego un buen dia y se enamoro de una bella doncella que vendia caramelos en la puerta del metro, la doncella le correspondio con una sonrrisa hermosa a pesar que solo le quedara un diente, comenzaron a salir, a comer caramelos, perillas le invitaba a tomar copas al puerto pidiendo creditos rapidos y prostituyendose para sacar el dinero.
Paso el tiempo y decidieron casarse, ella decia que era del Opus Dei y queria llegar virgen al matrimonio, Perillas le respetaba ya que era el unico ser humano que le hablaba.
Era hermoso verles correr por la playa, jugar a la petanca, meterse heroina en las cañas, sentarse en un parque y disfrutar de las moscas que les rodeaban, el le hacia un no show (arte de quedar y no ir), ella le hacia otro, quedaban en el centro a las 17hs y cada uno aparecia en otro lugar a otra hora diferente, era una relacion maravilllosa, un dar y tomar, un cagar y mear.
Ya era el dia de la boda, habian quedado en casarse en la Catedral de valencia el sabado por la mañana pero por las casualidades de la vida aparecieron ambos en castellon el domingo por la mañana, como no tenian invitados nadie se dio cuenta, y tampoco se dieron cuenta que se estaban casando en una mesquita, pero ya eran cosa y coso oficialmente.
Lastima que la noche de Bodas luego de tantas esperanzas, la bella doncella era un antigo maquinista de renfe que se vestia de mujer para sacarse unas pelas vendiendo caramelos, una pena, una tragedia de amor

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hiva de ir va sin h hijo de mil putas. Se escribe asi: iva. La putisima madre que te pario.
Estan buenas las historias y el blog también, adelante.